25 de enero de 2008

Carta abierta a Piedad Córdoba

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Santiago de Cali, 16 de enero de 2008

Soy un colombiano más que tengo el derecho de vivir en paz conjuntamente con mi familia y mis vecinos. No sé si usted, Señora Córdoba, tenga el más mínimo conocimiento de lo que puede ser una vida tranquila y sosegada, pues siempre que aparece por los medios de comunicación da la impresión de ser una persona explosiva, conflictiva, peleona. Creo que usted nunca pudo tener una niñez digna y menos, vecinos con quien jugar ni compartir los mejores momentos de la vida, ni quiero saber su época de colegio o escuela.

Siempre he tenido muy claro que para poder comenzar alguna actividad en la vida es indispensable contar con la paz interior, estoy seguro que usted nunca ha tenido un acercamiento a lo que pueda significar esto. No sé si trata a su familia en la misma forma que pretende tratar a la gran mayoría de familias que vivimos en este bello país, pero que por los desaciertos de personas como usted lo tienen en el lamentable estado en que se encuentra.

Usted pregona a los cuatro vientos las desigualdades de clases, de la pobreza, la miseria que le ha tocado ver en sus recorridos, pagados por el gobierno nuestro o extranjero o por sus seguidores que creo que con sus demostraciones cada día serán menos. Por qué no piensa que con actitudes como la suya, de apoyar una causa que está descalificada por todos los pueblos y gobernantes del mundo e incendiar toda una comunidad, se pierden millones de pesos en una guerra cruel, que servirían para calmar el hambre de los nuestros y de los vecinos de nuestras fronteras que padecen situaciones aun más graves que las nuestras y que sus gobernantes tratan de disimular con un discurso pasado de moda y poco convincente.

El apoyar el despeje de Florida y Pradera puede sonar muy patriota pero qué sucede con los que quedamos en el área ¿A Ingrid la liberan y creo que de inmediato se embarca en un avión y 'voila La France'. Usted mejor que nosotros conoce lo que viene, y si no lo recuerda se lo menciono: Florida y Pradera es el paso obligado de la guerrilla que procede del Huila y Tolima por el paramo de Roncesvalles el cual se encuentra a muy pocos kilómetros de la zona montañosa en los límites de Palmira, Florida y Pradera y la parte de atrás de Aguablanca, el polvorín más grande que pueda tener ciudad en Colombia, pues se encuentra lindando con las calles de estas poblaciones.

¿Y qué sucedería a continuación de que los protegidos y defendidos por usted tomen posesión del territorio? secuestros, atentados terroristas, más desplazamiento, deterioro total de la vida en Cali. No sé si usted permitiría que al lado de su vivienda colocaran un antro de vicio, violencia, robos, secuestro, muerte y mucho más. ¿Quién se la aguantaría acudiendo a todas las estancias del gobierno y a la comunidad internacional para que le arreglasen el problema?

El despejar estos dos municipios es la muerte para nuestra ciudad (Cali) y nuestro departamento (Valle del Cauca). ¿Por qué no propone un sitio en su territorio? ¿O es que ya nadie la quiere de vecina? ¿Será que alguna vez leyó la urbanidad de Carreño de un Venezolano compatriota suyo? Por si no pasó por sus manos, hay una frase máxima que dice "Se debe respetar a los mayores en edad, dignidad y gobierno".

En nombre de todos los Colombianos de bien le solicito que por favor se dé cuenta del tremendo mal que nos está haciendo, simplemente por unas ambiciones electoreras y de poder, para complacer a otra persona más sectáreo, imprudente, radical, abusivo, intransigente, sanguinario, retrógrado, corrupto, criminal, ladrón, mal hablado y camorrero. Recapacite que aun está a tiempo para enderezarse.

Para finalizar, no es lo mismo estar retenido como usted lo asegura, que estar vilmente secuestrado y que personas como usted hagan un show estilo película con la desgracia y el dolor de los SECUESTRADOS y sus familias.

Si usted tiene un Dios, pídale que le ilumine, pues la mayoría de los 42 millones de Colombianos no podemos estar equivocados y usted tener la verdad.

Un Colombiano más

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